Es la fase de trabajo que desarrolla el Proyecto Básico, con la determinación completa de detalles y especificaciones de todos los materiales, elementos, sistemas constructivos y equipos. En el Proyecto de Ejecución se acaba de definir, hasta el nivel de detalle que sea necesario, la materialización última del proceso constructivo, sus especificaciones, calidades, etc. y el cálculo y diseño técnico de los sistemas estructurales y de instalaciones. Asimismo se define un presupuesto riguroso en el que se desglosa el coste económico de dichos elementos y su puesta en obra.
En FIT* entendemos cada proyecto como un proceso continuo. Los planteamientos iniciales expuestos en el Anteproyecto y concretados en el Proyecto Básico se acaban de detallar para permitir su puesta en obra.
Las soluciones constructivas, materiales, sistemas de instalaciones, etc. se han ido diversificando en un abanico de opciones casi inabarcable que pretende dar respuesta a los cambiantes gustos del mercado y a las distintas necesidades de los usuarios. El objetivo de FIT* es aportar un criterio profesional basado en la experiencia y el conocimiento técnico para que las soluciones elegidas sean coherentes con los planteamientos de diseño iniciales, optimizando la inversión a realizar y aspirando a una ejecución plenamente satisfactoria del Proyecto Arquitectónico.
